Efectivamente, las camas articuladas necesitan de un colchón adaptado para este tipo de somier. No es recomendable usar colchones muy gruesos, colchones con muelles o con espumas muy densas que impidan al somier articular con soltura. En caso de no usar colchones para cama articulada, notarás que la cama no articula correctamente. Además, se podría forzar el mecanismo del somier dando lugar a problemas técnicos como ruidos molestos durante el descanso, ruido excesivo al poner en marcha el mecanismo electrónico, forzar el motor hasta el punto de que se averíe, etc.

En resumen, los principales problemas de no usar colchones para cama articulada son los siguientes:

• Mala articulación del somier
• Reducción de la vida útil de la cama
• Problemas de averías
• Generación de ruidos incómodos debido a que el mecanismo se ha forzado en exceso.

Los colchones para camas articuladas deben de poder doblarse bien, por tanto no suelen ser muy gruesos, usan materiales flexibles como la viscoelástica o el látex y llevan el núcleo articulado o perfilado mediante unos cortes que se les realiza en la esponja haciendo de bisagra para que articulen adecuadamente.

No.

La viscoelástica es un material adaptable y flexible ideal para usarlo en camas articuladas. No obstante, la mayoría de colchones viscoelásticos del mercado no tienen un núcleo 100% viscoelástico. Salvo algunas pocas excepciones, los colchones viscoelásticos tienen un núcleo formado por varias capas donde la viscoelástica no es el material predominante, ya que encarecería el colchón en exceso. Normalmente, los colchones tienen una base de espuma firme llamada HR que forma la base del colchón. Sobre la base se ponen capas de otros materiales que le aportan confort al colchón como la viscoelástica o el látex.

En ocasiones, se denominan colchones viscoelásticos a modelos con finas capas de visco en el acolchado. Por tanto, antes de comprar un colchón para cama articulada viscoelástico, investigue adecuadamente los materiales que forman su núcleo.

Sí, pero sólo en caso de que el núcleo esté formado al 100% por látex.
El látex es un material flexible y por tanto apto para usar en camas articuladas. No obstante, sólo será adecuado si su núcleo no tiene otro tipo de materiales.
En caso de ser un colchón que mezcla distintos materiales en su núcleo, estaríamos en el mismo caso que los colchones viscoelásticos: Sólo sería apto si los materiales más rígidos de su núcleo van perfilados para su uso en camas articuladas.

No. Los colchones de muelles son demasiado rígidos para su uso en una cama articulada.

Para elegir el colchón ideal, céntrate en estos 4 requisitos imprescindibles:

• 1. Grosor Máximo: No debe superar los 22 cm para garantizar una articulación correcta y evitar daños estructurales.
• 2. Núcleo Adaptado: El núcleo necesita cortes transversales (perfilado) que permitan el pliegue total. Viscoelástica o Látex flexible son los materiales óptimos.
• 3. Funda Flexible: La funda debe ser elástica y sin acolchados rígidos que impidan el movimiento del colchón.
• 4. Certificación Indispensable: El fabricante debe especificar que es "Apto para Cama Articulada". No te fíes solo de que sea de espuma; ¡la adaptabilidad del núcleo es clave!

Por supuesto. Los colchones para cama articulada se pueden utilizar en cualquier tipo de somier o base, canapé, etc.
Además, siempre puedes complementar tu colchón con un colchón antiescaras para casos de poca movilidad del paciente.